Finca la Atalaya es un vino de espíritu clásico, complejo, profundo y elegante, que procede de la selección de los terrenos más calizos de nuestra finca. Y ahora que ya lo sabes todo de nuestro Valtravieso Crianza, es el turno de desentrañar todos los secretos de Finca La Atalaya de la mano de Ricardo Velasco, enólogo y director técnico de Valtravieso. ¡Empezamos!

¿Por qué el reserva de Valtravieso se llama Finca La Atalaya?

Nace con la añada 2017, aunque se ha empezado a comercializar en 2021, y está inspirado y cultivado en una parcela muy especial de nuestra finca La Revilla. Esta parcela, llamada La Atalaya, es la parte más caliza y menos productiva de la finca. Buscamos precisamente esas características de este terreno porque así conseguimos un perfil más Ribera, con una expresión más marcada de fruta madura y más concentrado.

¿Cómo es Finca La Atalaya?

Nuestro reserva es el vino más tradicional que elaboramos en Valtravieso: es un vino con un perfil de Ribera clásico, con notas de madera bastante presentes y con un porcentaje de barrica americana en la crianza (en torno a un 30%), tiene una fruta bien madura y una persistencia en boca muy amplia. Finca La Atalaya es un vino que seducirá a los consumidores que buscan vinos clásicos y elegantes.

¿Qué variedades de uva se utilizan para elaborarlo?

La base de Finca La Atalaya es la Tinto Fino, también llamada tempranillo, que obtenemos de la finca homónima. A esta variedad autóctona de la Ribera del Duero le acompañan, en función de las añadas, Cabernet Sauvignon y/o Merlot, variedades procedentes de otras parcelas de la finca la Revilla. En nuestro Finca La Atalaya 2017, por ejemplo, se utilizó un 90% de Tinto Fino y un 10% de Cabernet, que aporta una estructura tánica al vino y una acidez que permite alargar la guarda y una mejor evolución en el tiempo. 

¿Cuántos meses de barrica tiene Finca La Atalaya?

Es un vino que ha estado más de 15 meses en barrica, aunque la normativa de la Denominación de Origen Ribera del Duero indica que un reserva debe estar 12 meses. En el caso de Finca La Atalaya 2017 ha estado esos 3 meses más porque la añada de 2017 fue especial: de poca producción pero mucha concentración y el vino necesitó una crianza más larga para estar en estado óptimo de consumo. La crianza va afinando el vino y aporta microoxigenación, lo que va uniendo todos los componentes y haciéndolos más suaves y armoniosos. Después de esos 15 meses de crianza, Finca La Atalaya ha reposado al menos 12 más en botella antes de salir al mercado.

¿Con qué podemos maridar este vino?

Finca La Atalaya es un vino con más estructura y fruta madura, con un paso en boca envolvente, voluminoso, con gran textura y un buen nivel de acidez, largo recorrido y profundidad. Por eso marida a la perfección con platos contundentes de nuestra gastronomía castellana, como un guiso de rabo de toro, lechazo asado o un plato de caza.